Qué valorar en la definición de un proyecto de sala blanca para el sector farmacéutico
Los criterios a valorar en la definición de un proyecto de sala blanca para el sector farmacéutico son diversos y deben ser
Hay determinados procesos donde se necesita un absoluto control del entorno para garantizar la excelencia del producto. Esto requiere una zona 100% aislada para evitar cualquier contaminación, tanto interna como externa. En dicha situación nuestros grandes aliados son los diversos tipos de cabinas de flujo laminar.
Estos equipos son, a grandes rasgos, espacios sometidos a tratamientos específicos del aire, lo que permite crear áreas con estricto control de partículas en suspensión. Su funcionamiento consiste en crear “barreras de aire”, lo que permite que éste fluya a una velocidad constante en una única dirección -eliminando así las turbulencias-, algo que también se conoce como flujo de aire laminar.
La limpieza en estos recintos ventilados se debe al empleo de filtros HEPA, que atrapan las partículas arrastradas por el flujo del aire. Tienen una eficacia del 99,995% para partículas de 0,3 µm, proporcionando aire limpio y constante a una velocidad de 0,3 a 0,5 metros por segundo. De este modo, las cabinas consiguen crear un ambiente estéril y libre de cuerpos extraños.
El uso de las cabinas de flujo laminar suele ser empleado en procedimientos de control microbiológico, tomas de muestreo, zonas de pesadas; aunque también se usan en multitud de procesos científicos: desde fecundaciones in vitro hasta la realización de análisis clínicos o el cultivo de tejidos. Se trata de una pieza clave de todo laboratorio que se precie.
No obstante, también hemos de tener en cuenta para lo que nunca debemos usarlas: en procesos donde entren en juego agentes biológicos contaminantes. En esos casos habrá que emplear las cabinas de seguridad biológicas, preparadas expresamente para garantizar la protección del producto y del operario.
No hay que olvidar que la protección que ofrecen las cabinas de flujo laminar se centra en el producto, pero no así en el operario. Este debe vestir el equipamiento adecuado, ser un profesional formado en la protección de riesgos y conocedor de las normativas. Las que rigen estas cabinas son las normas IEST-RP-CC002.3 y NSF/ANSI-49.
La principal clasificación de este tipo de cabinas se basa en la posición en la que se encuentra su filtro HEPA, denominándolas verticales si se ubica en la parte superior y horizontales si este se encuentra en la zona trasera.
En la cabina de flujo laminar horizontal el aire filtrado proviene de la parte posterior del recinto. Atraviesa la cámara principal en una corriente unidireccional horizontal y es expulsado por la abertura frontal.
Por otra parte, en la cabina de flujo laminar vertical el aire limpio proviene del techo, y el filtrado atraviesa la cámara principal del recinto con una corriente unidireccional hacia el suelo. Posteriormente es expulsado por la abertura delantera del recinto.
La diferencia entre ambos tipos de recintos consiste en que, en las cabinas de flujo laminar horizontal, hay un número ligeramente menor de turbulencias, ya que la corriente de aire no impacta tan directamente en el propio producto. Por su parte, las cabinas de flujo laminar vertical ofrecen una protección más adecuada de los operarios, por lo que son más convenientes si trabajamos con agentes potencialmente peligrosos.
Es necesario tener en cuenta que, independientemente del tipo del que se traten, estas instalaciones son garantes de la seguridad humana y del resultado final del proceso que con ellas se realice, por lo que resulta importante proporcionarles un mantenimiento diario y un rutinario cuidado profesional que les permita seguir trabajando de forma adecuada durante toda su vida útil.
En resumen, los distintos tipos de cabinas de flujo laminar son precisas herramientas de trabajo de laboratorio, necesarias tanto en el ámbito de la investigación científica como en el de la producción de fármacos. Gracias a ellas crearemos un ambiente limpio de partículas y seguro para el personal, el producto y el medio ambiente.
Los criterios a valorar en la definición de un proyecto de sala blanca para el sector farmacéutico son diversos y deben ser
Los filtros HEPA H14 son uno de los sistemas de purificación de aire más efectivos que existen. Hablamos de su diseño, uso
El objetivo de la normativa EN-1822 se basa en establecer la clasificación de los filtros absolutos, así como su designación y los
¿Qué es la FDA? Visualiza en tu cabeza un gran supermercado. Pasillos y pasillos repletos de productos preparados para su consumición. Ahora,